24 marzo 2011
No entiendo a los hombres, por Josué Barrera.
15 marzo 2011
Vesna, un fragmento de mi futura respuesta.
"[...] alguna vez espero hacerlo [...] Escribir algún cuento, algún texto y mandar(te)lo. Por compartirlo, por creer que puede compartirse. No sé... quizás seamos las Tolkien-Lewis del futuro."
Vesna Alic.
Quizás lo seamos, ¿no? Una versión femenina, un poco más moderna, indudablemente sin la capacidad de Tolkien (en mi caso) para poner tantos nombres a cada uno de sus gloriosos (y centenares de) personajes (desgraciadamente, aunque disfrute mucho escribir, ya me di cuenta que soy MALA para elegir nombres y poner títulos), ni con su capacidad creadora o la genialidad fantástica de Lewis, pero sí con el mismo fervor hacia las letras y, principalmente, la amistad.
¡Gracias por esa analogía tan maravillosa, amiga!
Un halago increíble, o mejor dicho una aspiración: Tolkien y Lewis.

Etiquetas:
Amistad,
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GODOSHITA,
leer
12 marzo 2011
07 marzo 2011
¡Hombres!
Tere: ¿Se te cayó algo?
Flaco sorprendido: ¿Qué?
Tere: Que si se te cayó algo.
Flaco: No no, ¿por?
Tere: Ah, no sé, me pareció.
"Las mujeres siempre saben cuando les estamos mirando el culo.
Una cosa más para la que nacimos torpes y obvios."
Una cosa más para la que nacimos torpes y obvios."
02 marzo 2011
It's the final countdown.
¿Hasta cuándo me va a seguir pasando esto?
¿Hasta cuando voy a pretender ser más fuerte de lo que soy?
Mi cara se asemeja a una piedra, mi postura es imperturbable,
pero por dentro...
Repito:
este indefinido rejunte de emociones me está matando.
"¿Tenés ganas de volver a Buenos Aires?", me preguntan.
Y yo no sé qué responder. Por supuesto, tengo ganas, me fascina, extraño mis días allá, me gusta lo que hago y, por sobre todas las cosas, me gusta lo que estoy viviendo. Pero, no, porque allá extraño mi familia, extraño mi casa, mi cuarto, mis días acá. Estoy tan arraigada a ambos lugares que cuando llega el momento de irme, ya sea de Buenos Aires como de San Martín, la situación se asemeja a la de despedirse de un amigo muy querido, a quien sabes que volverás a ver, pero luego de cierto tiempo, y con toda seguridad, extrañándolo demasiado durante ese lapso en el que estarán distanciados...
Respuesta: "Sí y no". No puedo andarme con tantas vueltas.
Gracias a todo un trabajo mental de abstracción, aprendí a sentirme BIEN en cada lugar. ¿El método? Establecer un muro. Estoy allá, y ESTOY ALLÁ. Estoy acá, y ESTOY ACÁ. Trato de evitar, y me enorgullece comprobar que suelo lograrlo, pensar en "el otro lugar", en el que no estoy y desearía estar.
Aún así, me encantaría chasquear los dedos y aparecer en Buenos Aires, chasquear los dedos y aparecer en San Martín.
Me encantaría evitar la previa de la partida que se hace eterna, pero al mismo tiempo pasa a una velocidad indescriptible.
Me encantaría evitar la despedida, la imagen de tus viejos impasibles, felices de que estés en pleno camino del progreso, pero destrozados por dentro. Me encantaría dejar de pensar aquello que me dijo una de mis mejores amigas: "Ellos siguen con su misma vida, pero con una persona menos en ella".
Me encantaría no sentirme tan dividida.
Y sí... son los "últimos días" otra vez.
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